sábado, 29 de agosto de 2015

secuela delirante



Esta vez sólo me dedicaré a escribir, interrumpiendo mi relato sólo por infrecuentes links.  La vida es recurrencia, un concepto que valga la autoafirmación ya comenté en el post anterior en el video. Pero la recurrencia es extraña porque se esconde bajo  distintos disfraces. Siempre estuve cerca de conocer la locura (así decía Bunbury), ha dormido conmigo muchas veces de hecho, pero es una amante 
caprichosa y promiscua y siembra en muchas mentes ideas parecidas. Probablemente eso duela más que cualquier engaño carnal. Lo siento, estoy divagando, aunque por eso he comenzado a escribir. Sin  embargo, algo puntual quiero dejar:

Había tomado tres canciones relacionadas a números de bandas de brit pop (la primera era una canción que no tenía nombre de número pero sí su álbum, elegí Tender porque, quien sabe, sea la más
conocida tal vez), las otras dos eran 42 y 72.  Me dediqué a buscar palabras comunes entre las tres canciones, quién sabe por qué. Menos aún debe saber nadie que lo que encontré fueron tres palabras
comunes lo que no es de extrañar pero que combinadas en orden alfabético dicen:

Get to you.

que significa: Llego (llegar) a tí.

Que lo que yo busco, que no sé qué es, quiera "llegar a mí" (o tal vez más sorprendente, "haya llegado a mí" es algo tan maravilloso como escalofriante. La locura posee ambas cualidades.

James Morrison, el homónimo del famoso integrante del club de los 27  (72 al revés ya que estamos), tiene un tema con ese nombre Get to you  Él hace brit pop también ya que estamos de la nueva generación (como Coldplay digamos).

Leo un libro, El Delirio de Turing, se llama y no puedo dejar de pensar en códigos. Lo he ocultado un par de años, pero así arranqué mi carrera en investigación. De modo indirecto, como mirada de Geisha, es verdad. Sólo me preocupaba implementar el famoso algoritmo AES (porque no eligieron Serpent nunca entenderé, bueno sí lo comprendo pero ha de ser que el mundo oficialmente no lo dominan los criptoanalistas sino los arquitectos informáticos, después de todo, Dios es el arquitecto por excelencia, aunque obviamente también es el mejor encriptador de todos los tiempos).
Perdón, sigo divagando, mejor así. Este es un paper de lo que logré .  Siempre pensé, que USA debía cambiar su lema: debería decir "IN MOD WE TRUST", esa increíble operación sobre la que yace
todo el mundo de los códigos modernos y la computación misma. Yo implementé el AES en una FPGA, simplemente una versión de la máquina universal de Turing. Yo quise ser Turing, quise ser Gödel, ahora sólo me limito a mencionarlos, como aquel que mira el mundo por el ojo de la puerta en el mundo de Hesse, aquel que mira (como lo hacemos todos en verdad) indirectamente con mirada de Geisha.

Perdón sigo divagando y esto no es nada nuevo, fíjense acá sino.

Les debo un video que les prometo para el otro finde si el Gran Arquitecto así lo permite.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Agregue aquí su comentario